UC - Críticas
| Dirección: Isabel Coixet. País: España. Año: 2013. Duración: 108 min. Género: Drama. Guion: Isabel Coixet; inspirado libremente en “Gif”, de Lot Vekemans. Producción ejecutiva: Isabel Coixet y Adolfo Blanco. Música: Alfonso Vilallonga. Fotografía: Jordi Azategui. Montaje: Jordi Azategui. Dirección artística: Cristina Castells. V estuario: Agnes Bonet. Distribuidora: A Contracorriente Films.
Estreno en España: 26 Abril 2013. |
Interpretación: Javier Cámara, Candela Peña. |
EL AMOR DUELE
"Ayer no termina nunca" es la última propuesta de Isabel Coixet, esa directora tan endiosada por algunos como vilipendiada por otros. No lo será menos en esta ocasión, ya que su arriesgado ejercicio de estilo donde plantea una trama introspectiva y casi teatral con sólo dos personajes en escena, provocará una acogida igualmente radical, con el posicionamiento encontradas de veneradores y detractores. En esta ocasión, tengo que ponerme de parte de estos últimos, y es que la película me ha parecido francamente pesada y aburrida, con un discurso y enclave bastante oportunista, en una historia que no daba ni para 15 minutos siendo generosos...
SINOPSIS: La historia de “Ayer no termina nunca” nos traslada a la ciudad de Barcelona en el año 2017. Una pareja se reencuentra después de cinco años sin verse y de haber pasado unas circunstancias difíciles en sus vidas. Cuando sienten que el pasado ya no tiene importancia, de repente, vuelve. Las heridas no cerradas permanecen siempre abiertas.
Aún a riesgo de ser insultado y apaleado por su séquito de admiradores postmodernos, no puedo dejar de decir que la película es un peñazo de esos que hacen época y que las tres últimas palabras se te graban a fuego en el cerebro y se repiten innumerables veces durante la proyección. Y es que todo en la película está tan exageradamente inflado y tan lleno de ínfulas dramáticas que resulta artificial y nada creíble, y la emoción que se busca en muchas ocasiones se torna risa (en especial esos terribles flashes en blanco y negro donde toman cuerpo algunos de los pensamientos de los personajes). Se diría que el film parece el reverso pedante de esa maravilla reciente llamada "Blue Valentine", donde también se reflexionaba desde el dramatismo sobre la pareja con mucho más atino y mesura.
Ni siquiera se salvan de la quema sus esforzados y forzados protagonistas, Javier Cámara y Candela Peña, ambos muy intensos y que ofrecen destellos puntuales de su indudable talento, pero es que resulta imposible creerse algunas de las frases que sueltan, y sus interpretaciones (pese a todos los premios que quieran darles) quedan lejísimas de la maravillosa credibilidad que ambos ofrecían en la estupenda "Una Pistola en Cada Mano" de Cesc Gay. Coixet lleva su estilo dramático tan al extremo que la historia de amor y dolor de una pareja en su amargo reencuentro, acuciada por la incontinencia verbal de sus personajes (con diálogos adornados de una falsa y contínua transcendencia), no nos emociona y nos deja indiferentes. Tan sólo su pericia como directora consigue ofrecer una brillante puesta en escena utilizando unos recursos y escenarios casi minimalistas, lo único interesante del conjunto, que le dota de un sello de "qualité" a un cortometraje alargado hasta el hastío.
TRAILER